LA VIRGINIDAD ES EL MEJOR ORGASMO

Antes de comprar un automóvil, el posible cliente suele darle una vuelta de prueba. Antes de adquirir un perfume, el posible cliente suele rociar su mano con un poco de la fragancia. Antes de pagar por unos zapatos, el posible cliente se los mide frente a un espejo. Y, antes de consumar un matrimonio, ¿el posible cliente puede hacer un test drive?

Alrededor del tema de la virginidad, la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia Sexual ha emitido sentencias bipolares. Por un lado, ha promulgado la tesis que Macho + Hembra - Sexo Prematrimonial = Amor. Por el otro, ha sostenido que el orden de los factores no altera el resultado. Mejor dicho, un bando de juristas asegura que es más fructífero el camino de 'primero amigos y después (mucho después) amantes', mientras la otra facción asegura que 'primero cama y después te ama'. Pero, realmente, ¿cuál de las dos vías conduce a vivir por siempre felices, como en las telenovelas?

Un camino promueve ir a los Juegos Olímpicos, sin haber entrenado nunca; mientras la carretera alterna propone asistir a un bufé, probar distintos platos y al final enamorarse del favorito... La lógica me hizo pensar que la respuesta estaba en la última posibilidad, porque un buen catador solo desarrolla su paladar cuando ha probado muchos vinos; pero lo cierto es que aquel o aquella que escoge ser virgen hasta el matrimonio, tiene más probabilidades de experimentar un eterno éxtasis. Estos son los porqués:

- Los enamorados se conocen más: Excluir las relaciones sexuales de la ecuación, durante el noviazgo, reorienta el sentido de muchas actividades. Los viernes de películas en una casa sin papás, se vuelven solo para ver películas; las quedadas a dormir donde la mejor amiga, se vuelven quedadas a dormir donde la mejor amiga; los paseos a la finca con chicos y chicas en cuartos separados, se vuelven paseos de solo chicas. Hasta que algún leguleyo encuentra el vacío en la norma, argumentando que un delito es un delito únicamente cuando está tipificado en el Código Penal Sexual. En otras palabras, no es ilegal el uso de lengua y dedos, ni tampoco es ilícito el acceso a través de orificios secundarios porque ninguno rompe el himen. De tal forma, cuando la vida virgen cierra una puerta, se abren ventanas placenteras que estimulan a conocer nuevos flancos.

- Las estadísticas lo confirman: Las parejas que han practicado sexo antes del matrimonio, muestran mayores índices de divorcio. Para entender esa estadística, basta recordar a un niño que desempaca un juguete nuevo, en comparación al que recibe uno usado. En el primer caso, el que disfruta unos patines nuevos no solo se deslizará dichoso sobre el duro pavimento, sino que además sentirá como cada día se amoldan más a sus pies. En cambio, el que toma unos patines usados no solo maldecirá las ruedas gastadas y el modelo pasado de moda, sino que además sentirá el rastro de la pecueca del anterior dueño -quien querrá de vuelta su juguete, cuando se entere que tiene nuevo propietario-.

- No da punto de referencia: La virginidad es, sin lugar a dudas, el mejor regalo que puede dársele a la pareja. Aunque su valía no está en la pureza que se entrega, sino en el hecho de obsequiarle una ausencia de competidores, de cualquier punto de referencia. Es regalarle un gobierno sin oposición política, porque no hay izquierdas o derechas, solo un centro. Es regalarle cinco estrellas a la película, porque no hay cine comercial o independiente, solo una única obra de arte. Es considerar al eyaculador precoz, un maestro del quickie. Es considerar a la frígida, una maestra de la pasión interior. Es considerar al que no se le para, un maestro del auto control. Es considerar a la mojigata, una maestra de la prudencia.

El sexo no necesariamente hace prostitutas, ni la virginidad necesariamente hace santas. El sexo es el causante de apedreadas en plaza pública, pero la virginidad es la causante de sacrificios al interior de un volcán. El sexo da hijos comunes, pero la virginidad aunque dio a Jesús, también suministró a Darth Vader. Mucho sexo puede ser el tiquete al infierno, pero mucha virginidad puede ser el tiquete al cielo islámico como integrante del harén de un terrorista suicida. Sin embargo, la virginidad es una mejor elección porque la ignorancia es el perfecto aliado de la felicidad humana; el único defecto que tiene tal escogencia, es que después del matrimonio el sexo es prácticamente nulo.

Hasta una próxima verdad humanamente irracional, Amigos de lo Salvaje.

Lucano Divina

Comandante Macondo de la Revolución Animal

Selvas de Suramérica, diciembre 15 de 2011

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